viernes, 29 de abril de 2011

Las mejores escenas

El Sr Nocivo me ha encomendado la ardua tarea de hacer una selección de escenas en varios apartados. Como toda maldición encadenada que se precie, debo extenderla y castigar con ella a otras personas, por aquello de que no me apetece que luego me salga una niña de un pozo cabreada a liármela parda por no haber difundido esto o algo. Bueno, tras mirar blogs que sigo para ver quién podría elegir una lista interesante, los elegidos son Ojete Films, Dana (no sé si encaja en alguno de tus blogs, pero me gustaría ver tu selección ^^), Motivos para levantarse, Deus ex machina y él, que ya se apañará, pero de alguna manera quiero ver su lista.

Allá va:

Escena más graciosa



La escena del camarote, de Una noche en la ópera. No sé si es la escena con la que más me he reído, pero sé que cuando me quiero reír, los Marx son mi apuesta. Y esta es mi película favorita de ellos. Así que, he cogido la escena quizá más famosa, y una en la que salen los tres, que aunque tengan momentos grandiosos por separado o por parejas, yo siempre los prefiero juntos.

Escena más triste


Bueno, esto va a ser como en la anterior y como en todas. Quizá hay escenas más tristes y que me lo han parecido, pero hay que elegir, así que pongo, al menos, unas cuantas representativas. Con Eduardo Manostijeras lloro muchísimo. Amargamente, además. El festival de las lágrimas comienza justo ahí, cuando el personaje de Winona Ryder le pide que la abrace, y él contesta que no puede. Me supera. Él, siendo tan bueno, tan inocente, que por unos minutos tenga que cargar con esa maldición en lugar de manos. Que le odien y lo traten mal por ello. Que, teniendo a la persona que quiere delante, no pueda abrazarla ni tocarla con sus manos. Me parece tan triste...
Escena más alegre

No sé, amo esta película y es ver o escuchar esta canción, y me dan unas ganas increíbles de ponerme a dar saltitos por ahí y cantarla a viva voz. Qué felices se les ve, oye.

Escena más agridulce

No pongo video porque no quiero hacer spoiler. He elegido el final de Welcome to Dongmakgol, una de las películas más preciosas que he visto en mi vida. Pero ese final...hay una mezcla de sensaciones: sí, piensas que es precioso, pero a la vez te entristece. SUPER MEGA SPOILER: La imagen de los soldados, con una sonrisa en la cara, enfrentando a la muerte me pone los pelos de punta.

Escena más rara
Alguna de Miedo y Asco en Las Vegas. No se me viene ninguna en concreto a la cabeza, pero supongo que hay para elegir entre las múltiples de alucinaciones. La droga es mala, chicos.

Escena más perturbadora
El final del corto Dumplings, que podéis ver aquí. La película no me he atrevido a verla, tuve suficiente con el corto. Me entra de todo y más, solo de pensarlo. Lo pasé fatal con SPOILER el aborto provocado, y cada vez que comía un dumpling...pero con los del final, siendo su propio feto ya fue demasiado para mí.

Escena con más suspense
Va de finales la cosa. Elijo el de Se7en. En realidad, los últimos 20 minutos son acojonantes.

Escena más aterradora
Como soy super valiente, no logro recordar ninguna escena que me diera verdadero miedo. En realidad, creo que no he visto las películas suficientes, porque cada vez creo que soy más susceptible, y que me traumatizaré y así pasa, que veo pocas. Como no se me venía ninguna a la cabeza, solo alguna que me metiera mal rollo, pero no miedo...recurriré a un trauma de la infancia. Vi El silencio de los corderos cuando era pequeña (¿qué edad tendría? ¿8 ó 9?), y ni siquiera me acuerdo si Lecter me impresionó como para temerle o qué. Solo sé que hubo una cosa, que no sé por qué, se metió en mi cabeza y no hubo manera de que saliera. Todas las noches antes de dormirme, me acordaba de ello. Se trata de la escena cuando Lecter escapa, y se carga creo recordar -sí, obviamente, la he vuelto a ver con más edad, pero ya hace mucho y me falla la memoria- a dos policías. Luego, llegan al lugar del crimen el resto de agentes, y se encuentran con uno de ellos colgado de la jaula, muy a lo Jesucristo style, con el estómago abierto. Cómo me traumatizó esa dichosa imagen. De una manera terrible.

Escena más romántica

Lo mejor del video es que con el idioma del audio y los subs, te enteras de todo. La demostración de amor que más me ha emocionado nunca. Cómo salvarle la vida a la persona a la que quieres, de la manera más original posible, demostrando que solo tú puedes hacerlo, que solo tú sabes que tienes que comprenderla y quererla tal y como es, en lugar de cambiarla. Y que tienes que hacer lo imposible para salvarla.

Mejor diálogo
Cuando pienso en diálogos, en frases para recordar...mis predilectos son el señor Groucho Marx, su aprendiz más aventajado, Woody Allen y el guión entero de Pulp Fiction, destacando la escena del QUÉ y el posterior discurso de Samuel L Jackson, mi favorita -y una de mis escenas favoritas para siempre-. También tengo un buenísimo recuerdo del guión de Martín (Hache). Pero con algo me tenía que quedar, y me quedo con Woody, porque se merecía estar en esta lista, y hace poco volví a ver Annie Hall (aunque la pillara empezada) y es una perla tras otra. Lástima que me perdiera el glorioso comienzo.

Mejor escena sin diálogo

La primera parte de Wall-e, coincido con el Sr Nocivo. Es perfecta, y no hace falta nada más que ese pequeño robot de mirada adorable para comprender lo humano que es, y que nos emocionemos y ríamos con él. El video solo una pequeña muestra, lo que encontré por youtube.

Mejor pelea

Debería ir LA PELEA, pero me reservo esa película para otra escena. La pelea contra Elle Driver también es orgasmo puro, pero elijo la mítica escena de Kill Bill Vol 1.

Mejor escena musical

Me encanta de principio a fin. Me parece perfecta, y la selección de canciones una pasada.

Mejor baile




Pensé en los bailes de Cantando baja la lluvia. Hasta en el baile final de Nina en Cisne negro. Luego me acordé de Uma Thurman y John Travolta...¡¡John Travolta!! Este hombre bailando siempre me deja con la boca abierta. Mi mejor recuerdo de Fiebre del sábado noche son sus bailes. Grande.

Mejor Discurso

Con permiso de Chaplin y su discurso de El gran dictador, elijo Trainspotting, y el monólogo inicial de Renton. Nuestra sociedad actual en un minuto y medio.

Mejor comienzo
Indiana Jones y el templo maldito es mi película favorita de la saga de Indy, y el comienzo me parece insuperable. Esa escena en el restaurante, Indy negociando como puede, envenenado, buscando el antídoto en medio de un caos terrible. Adrenalina y ritmo para una película de aventuras que es amor puro.

Mejor muerte

Scarface. ¿Hace falta decir algo? Es demasiado épica. Con dos cojones hasta el final.

Mejor clímax
Requiem por un sueño. Os dije antes que las drogas eran muy malas. Un final para pasarlo jodidamente mal. Todo se va truncando poco a poco, vaticinando lo que será un final horrible. Pero yo no pensé que fuera a ser tan horrible. En un momento, ¡crack! Todo se tuerce de manera irreversible, y comienza la agonía final -¿cuánto dura? ¿unos 20 minutos?-, a cuatro bandas, con esa banda sonora y esa trama cada vez más intensa.

Mejor final
Aquí sí que sí: Oldboy. ¿Por qué? Por qué es brutal. Porque no podía creérmelo. Porque no me podía dormir. Porque te deja sin palabras. Porque es un giro increíble. Porque es la venganza más perfecta del mundo. Porque es demasiado intenso: sientes suspense, nervios, te sorprendes, sufres, sientes tristeza...Todo.

La escena que nunca debió ser filmada
Bueno, lo fácil era pensar en mis odiados y en escenas de películas que aborrezco para esto. Y cierta persona me dio la idea (y eso que él ni ha vista la película, pero se la he comentado con tanta indignación que...). Se trata de un trozo de Elephant, de mi querido Gus Van Sant (preparados sus admiradores para llamarme retrasada, como aquel anónimo que me mandó ver Crepúsculo por criticar Last Days, por no ser capaz de entender la grandeza de esta película, solo apto para mentes cultuvadas y superiores...impensable que simplemente no guste aunque se comprenda). Se supone que en la película, Vas Sant enseña los hechos, la vida normal de unos chavales de instintuto. Sin juzgar, enseñando la normalidad antes de lo que ocurrió. Pues total, hay tres chavalas que se ponen a contar chorradas super mega superficiales super totales, o sea. Una de ellas, creo recordar, come un poco de ensalada. Pero, ay tía, que la salsa engorda mazo. En serio, típica conversación de niñatas medio pijas que se interesan por cosas estúpidas. Y no quieren comer. Eh, pero aquí viene lo mejor. Se meten en el baño, a vomitar las tres a la vez, con total normalidad, interrumpiendo su conversación profunda. Señor Van Sant, varias cosas. ¿Qué coño van a vomitar si no han comido? Las bulímicas se comen, se dan atracones, y vomitan. Las anoréxicas no comen. Estas niñas no comen, pero también vomitan. Magnífico. Y encima, para no querer juzgar, parecen retrasadas mentales superficiales. Van Sant, no sé si esa será su idea de las enfermas que padecen esas enfermedades, pero me parece una falta de respeto acojonante. Y de paso decirle que hará planos preciosos y sus travellings serán lo más, pero de la anorexia y la bulimia no tiene ni puta idea. Vergüenza e indignación sentí cuando lo vi.

La Mejor Escena de la Historia

Le he dado mil vueltas a esto, y no ha habido manera de poder elegir una. ¿La mejor escena del cine? Buff. Nada. Imposible elegir. Así que digo: pues elijo una de mi película favorita. Así que, repito con Oldboy. En esa escena, Min-sik Choi, se come un pulpo vivo. La escena ya ha dejado de darme asco -joder, un pulpo vivo-, y cada vez que la veo, me fascina. Esa mirada de él, esa forma de mover los tentáculos del pulpo... Buff. Me quito el sombrero. No es ni la mejor escena del cine, y tampoco mi favorita de esta película...peeero, ya digo, me era imposible, así que pensé en escoger una escena que me gustara -y estuviera en youtube- de mi peli favorita. Consideradlo solo una muestra de mi amor hacia esta película, porque no tenía ni zorra de que poner aquí. Era poner algo como esto, o una foto con un interrogante.


Hala, hecho. Me libraré de la maldición.

domingo, 24 de abril de 2011

Desmontando a los bastardos: Parte III

Mil años después, llega...

Capítulo 3: Noche Alemana en París

Iba a seguir con esto antes, pero me dije: hey, tienes el guión de la película en tus manos. Espérate para seguir cuando lo hayas leído, total, cinco meses antes, cinco meses después...La semana pasada, de viaje de unas ~maravillosas vacaciones~, me llevé mi guión querido y lo leí. Y cada vez me gusta más esta puta película. Pero vamos al capítulo 3.

Me parece muy bien que le reconozcan a Christoph Waltz la perfecta actuación que hace del grandísimo Hans Landa. Ahora, ¿¿por qué se olvidaron de Mélanie Laurent y su Shoshanna?? Para mí, está a la par que Waltz, y el personaje es el más profundo de toda la película. Al menos, yo lo veo así.

En este capítulo conocemos a Shoshanna, aquella chiquilla que huyó después de que Landa asesinara a sangre fría a toda su familia, y que sobrevive hábilmente en la París ocupada por los nazis, en su cine. Que no falten las referencias cinéfilas o las muestras de amor al cine por parte de Quentin. Y aparece el personaje de Daniel Brühl, un soldado alemán que luego descubriremos que, además, es un héroe de guerra y estrella de la nueva película de Goebbels. Y se acerca a Shoshanna, con buenas intenciones. Claramente, él se siente atraído por ella. Toma ya, un joven y amable soldado nazi ligando con una judía que intenta ocultar que lo es después de que un nazi matara a su familia. ¿Podría ser mejor? Sí. Aunque Shoshanna no quiera, algo en él le gusta. No hace falta que lo diga, no hace falta que deje de mostrar que no está cómoda y que siente repulsión por su uniforme. Hay algo (Tarantino lo indica en el guión, y en la película con la expresión de Mélanie Laurent es suficiente para que lo notemos).

El joven soldado nazi se encuentra a Shoshanna, y vuelve a hablar con ella. Ella lo rechaza, pero insisto: algo hay. Algo impensable, peligroso, una locura. ¿Un soldado nazi tirándole los trastos insistentemente? Vaya tela. Un soldado nazi pidiendo que se le juzgue por algo más que por un uniforme. Bueno, al fin y al cabo, ¿no querrían los judíos que no se les juzgara solo por ser judíos? Pero coño, él es un puto nazi. Aunque le gusta ella. Esto no puede acabar bien.

Después, una de mis escenas favoritas de la película. Liada suma: unos nazis aparecen en el cine de Shoshanna y la obligan a ir con ellos. La cara de ella es un poema. Llega a un restaurante: Daniel Brúhl (lo siento, se me olvida el nombre del personaje, los nombres alemanes son complicados) la espera, y agradece que haya aceptado su "invitación" para reunirse con él. ¿Y con quién está él? Con el mismísimo Goebbels (y su amante e intérprete). Jo-der. Una judía allí, sentada en la mesa de uno de los grandes del régimen nazi, por culpa del soldado nazi que quiere con ella. Y todavía se complica más la cosa: Daniel Brühl quiere estrenar su película en su cine. Estreno nazi en el cine de una judía. En serio, es que es todo taaaaaaaaaaaaan fuerte. Tensión, tensión, tensión.

Pero todo puede empeorar más: aparece Hans Landa. Si en la primera escena de la película, Tarantino sabía transmitir la tensión gracias al ritmo pausado y la presencia de Hans Landa, aquí se sirve de nuevo de Landa, y del duelo interpretativo. Hans Landa, por un lado, haciéndote sentir que lo sabe todo, que sabe quién es ella. No sabes cómo ni por qué debe saberlo, ni qué va a hacer, pero seguro que lo sabe. Ella: el terror en una mirada, intentando contenerlo. Me rindo ante Mélanie Laurent en esta escena, de verdad. Se quedan solos. Hans Landa habla. Te da la sensación de que cada cosa que dice, le va a llevar a descubrir la identidad de ella. Hable de lo que hable, aunque use ese tono cordial y agradable. Y notas que ella siente lo mismo: y se te contagia su miedo, su nerviosismo.Hans Landa insiste en tomar un postre. No quiere que ella lo pruebe hasta que llegue la nata. Según leí, los judíos no pueden mezclar esos dos alimentos (supongo que será verdad). Vaya cabronazo. Finalmente se va, sin muestras de que quiera ir a joderla, de que sepa quién es. Pero no nos quedamos tranquilos, sabemos que lo sabe. De alguna manera, lo sabemos. Shoshanna deja escapar todo lo que ha estado conteniendo mientras estaba con Landa. La angustia que transmite es tremenda.

Solo le ha hecho falta dos personajes (y dos actores tremendos) y una conversación sobre nada en particular para crear una atmósfera de tensión y nerviosismo como pocas. Cuando la vi por segunda vez, aunque sabía que no iba a pasar nada, no pude evitar sentir lo mismo. Es tremendo el poder de Landa, cómo te identificas con Shoshanna. Genial.

Y el capítulo de presentación de Shoshanna no podía acabar mal. Junto con Marcel, su pareja que trabaja en el cine, decide que van a rodar una película. Para los nazis. ¿De qué película hablará? ¿Cómo será? Bah, lo que te dé por imaginar no va a ser ni la mitad de épico que luego resulta ser.
Ah, bueno, y dice que va a incendiar el cine la noche del estreno, que las películas hechas con nitrato son muy inflamables. Detalle sin importancia que promete un final de mierda, sí. Forma muy poco interesante de acabar el capítulo y una manera malísima de hacerte sentir interés por el personaje de Shoshanna y su venganza (venganzaaa, venganzaaaaaaaaaaaaaa....de una mujer de los pies a la cabeza. Quiero ser un personaje femenino de Tarantino, quiero ser poderosaaaaaaa).

Ya solo quedan dos capítulos. El último es para hacer una fiesta con confeti y piñata de lo supa dupa ~awesome~y ~epic~ que es.

miércoles, 13 de abril de 2011

La No Recomendación: My Sassy Girl (2008)

La última vez que actualicé, pensé: hace mucho que no criticas ninguna película. Y con lo que me gusta criticar a mí, tenía que ponerle solución pronto. Pero claro, llevaba una racha que te cagas, solo viendo películas amor. Esta mañana volví a ver esa maravilla coreana llamada My sassy girl (que por cierto, le puse de nota 9, pero ni caso, es un pedazo de 10 como la copa de un pino porque es demasiado perfecta y demasiado preciosa), y me cabreé con el remake americano sin haberlo visto. Y dije: total, ya que te cabreas, lo ves. Y así criticas.

Bueno. No sé ni por dónde empezar. Se ve que a los americanos les jode que hagan mil comedias románticas por año y dramas románticos hechos para que lloren todos y ya, y que tengan que ser los coreanos los que tengan la comedia romántica perfecta, que encima tiene su parte de drama (y bueno, el drama se les da mejor en general, que por algo lo aman tanto...qué coño, se les da todo mejor así en general), y decidieron coger My Sassy Girl y...¿demostrar que lo podían hacer mejor? No sé, pero el resultado es una puta basura que no sirve para nada. Y los que adoren más esta versión que la coreana, ya pueden ir haciendo cola para el psiquiatra, porque algo grave tienen en la cabeza.

El caso. Tenemos al típico ultra soso americano, completamente plano y sin gracia y sin personalidad, que estudia y quiere un trabajo mazo de guay para tener el sueño americano. Y tiene un amigo. Echadle imaginación. Oh, sí. El amigo es más feo y más gordo que él, y es un pajero mental que cada vez que habla en la película solo lo hace sobre follar. Bueno, pues este chico sin gracia ni desgracia, está observando tías por la calle con su amigo el salido. Pero oh, él es tan super hombre, que no siente atracción por las chicas que ve. Hasta que la ve a ella. Ella es Elisha Cuthbert, que tiene ese aspecto de: mírame, soy rubia y americana, en el instituto fui animadora y me tiré a todo el equipo de futbol, y ahora sigo teniendo esa cara de guarrilla. No, no estoy siendo cruel: es lo que hay, es la cara que tiene.

Y claro, el super hombre americano, que es totalmente puro, se queda prendadísimo de ella. Oh, ella, la elegida. Qué bonito todo. Luego se encuentran en el metro, y se quedan mirando tipo: oh, el amor de mi vida. Bueno, esa mirada fingida, porque de actuar no saben mucho, y he visto piedras comunicarse con más química que ellos. Todo super poco tópico y bonito, ¿eh? Resulta que ella está borracha, y al día siguiente cuando se ven, también lo está, y es una niñata maleducada e insoportable. ¿Sabéis esas tías que cuando beben empiezan a hacer el imbécil y a ponerse ultra pesadas y que te dan ganas de pegarles una patada para que las soporte su madre? Pues así. Supuestamente, el personaje de ella debe ser de lo mejor de la película, increíble, maravilloso. Pero dan ganas de abofetearla. Y encima, se supone que me tengo que reír porque es gracioso que esté borracha y grite "chuuuu chuuuu" y "me gustan los plátaaaanos". Anda y que os den.

Todo pasa muy deprisa, y ella sigue igual de gilipollas, beba o no beba. Que si hacemos un juego en el metro de darnos hostias, que si te conozco de dos días pero ya digo que eres mi novio, que si vamos a celebrar los 33 días juntos (¿hola? es tan JENNNIH MI NINIAH 1 MESECITO JUNTOSH YA TE AMO TÚ Y YO SHIEMPREH)... Nada fluye. Ella se comporta como una imbécil, y el poco gracioso americano sufre las chorradas porque oh, la ama. ¿Por qué la ama? Vete a saber, si no tiene ningún tipo de sentido lo que hacen. Tiene tan poco sentido que un soldado les pregunta que qué relación tienen, él dice que son amigos, y ella: oh por Dios yo no soy novia de esteee...y luego le recrimina que dijera que son solo amigos, que ellos son novios. Un psiquiatra para la niñata esta, y un polvo para el aparladado este que aguanta que lo trate mal sin motivo.Porque lo trata mal. Hay un momento en el que él tiene una entrevista super importante, y ella se emborracha allí delante, se pone a decir subnormalidades y lo arruina todo. Pero hey, él la quiere. Y ella a él...nos tenemos que creer que también.

Intentos de hacer gracia y de ser originales hay varios. Por no hablar de esas imágenes sacadas de un videoclip malo. En fin, que transcurre la historia de la payasa esta, que si su padre rico no quiere que estén juntos (él es de familia humilde, claro), y el otro que ni siente ni padece, que está ahí por estar, pero eh, la quiere mazo. Por supuesto, para demostrar que la quiere, tenemos las pasteladas vacías que harían vomitar arcoiris a los ositos de gominola. Que si esta es la historia de la única vez que me he enamorado, que si esto es el amor verdadero, que si el tiempo con ella es el más feliz de mi vida...Claro, es que si el chaval no nos dice que la quiere, es imposible intuir en esta mierda de historia que haya amor o algo.

Oh, y me olvidaba. Para que os déis cuenta de la calidad de este pseudo-producto que seguramente debe ser perjudicial para la salud. Ella escribe guiones para películas. Su primer guión es Rose de Titanic volviendo para impedir que el otro se ahogue, y se ponen ambos ahí como si fueran los protagonistas de la película, a decir subnormalidades sin sentido que ni recuerdo. Pero era de vergüenza ajena, true story.

Sobre el final, solo puedo decir que es una enorme mierda, que intenta dramatizar y hacer más romántico el final de la coreana, pero eso. Mierda pura. SPOILERS (SI NO HABÉIS VISTO LA COREANA, NO LEÁIS). Para empezar, que si el novio se suicidó. Y luego, que a ella le da la vena de repente de que se tienen que separar, y él sin saber por qué y sin saber que ella está mal ni nada, solo dice al principio cuando está borracha: mi prometido me dejó, perolo hace en medio de una pataleta ridícula, que parece una excusa para que el tío se quede con ella un rato más. En la coreana, saben los dos que necesitan un tiempo. Él sabe que ella tiene un dolor muy grande en su interior. Lo sabemos desde que empieza la película. Y necesita liberarse de él para poder continuar. Ellos lo saben, y por eso se separan. ¿Estos? La tía lo deja plantado sin darle explicaciones (ay, o sea, no te puedo decir nada, que está en la carta), y él lo acata tan contento, dejando otra vez que lo traten como a una mierda. La carta de él es lo que he dicho antes, puke rainbows. La de ella: horrible, parece que lo haya estado utilizando a él (bueno, lo ha hecho), y no se entiende que en realidad le guste; al contrario que en la coreana, que entendías el dolor de ella y cómo se había comportado, y sabías que le quería a él. Y le dan más vueltas a lo del destino de forma estúpida, para poder enlazarlo con el final. Pero está todo forzadísimo (ella de repente sacando el tema del destino, diciendo que no le va a llamar, que ya se encontrarán si tienen que encontrarse...lo dicho, es subnormal). Y cuando se encuentran al final...El apretón de manos de la coreana es mejor que esos besos, que toda esa escena y que toda la película de mierda esta entera. FIN SPOILERS

Basura americana VS joya coreana: En la coreana, encontrábamos una historia que empezaba por casualidad. Un chico que no necesita abrir la boca para ser gracioso y para que te encariñes con él, que sufre por la extraña personalidad de ella. Extraña, diferente, única; que no insoportable. Su personaje es lo mejor de la película. Él al principio huye, ella le persigue. Ella tiene un dolor dentro muy grande, y él se da cuenta de que quiere ayudarla. La relación fluye, surge la confianza, los sucesos surrealistas que hacen que su relación sea única. Grandes momentos y recuerdos juntos, que te dan ganas de poder vivir a ti, una unión cada vez más grande. No es necesario que digan que se quieren. Nada. Sus miradas, sus gestos, sus actos. Todo habla por ellos. Todo es increíblemente real y especial. Esa lista de diez cosas que demuestra lo que te conoce una persona, cómo te quiere a pesar de tus defectos, cómo sabe que hay que tratarte, cómo te ve única con todos esos detalles de tu personalidad. El saber que es la única persona que tendrás a tu lado que te hará feliz. En la americana, esa lista es una chorrada que podrías escribir de cualquier persona que conoces de dos días...el mismo sentimiento. Y la historia: el chico americano idiota y soso que se pilla por la estúpida con cara de guarrilla que le putea y lo hace pasarlo mal los cuatro días que se ven, pero resulta que se quieren mucho. Pues vale.

Por favor, si no habéis visto la coreana, hacedlo ya. Esta mierda no la veáis a no ser que os guste criticar como a mí. Que me lo pasaré pipa criticando, pero estas cosas me duelen. Si es una mierda, que sea una mierda, pero que no hagan una mierda de algo precioso y perfecto.

Creo que la próxima que veré será La casa del lago, remake de la coreana Il Mare (la protagonista es Jeon ji-hyun, la misma de My Sassy Girl). Preparaos, yanquis.

PD: Es todo como muy monotema de Korea, pero es que se me enamora el alma con el cine de allí, y se me encabrona con las estupideces de remakes innecesarios.

PD2: Me ha quedado un poco larga, pero una vez empiezas, es difícil parar. Hay tanta gente a la que insultar y tantas cosas que criticar...

PD3: El director Yann Samuell es el responsable de esto. Adoro Quiéreme si te atreves. ¿Cómo es posible que sea el responsable de esta cosa y de esa película?