lunes, 17 de diciembre de 2012

Mis 10 Chicas Disney Favoritas

Por si alguien no se ha enterado, yo soy muy fan de Disney. Es mi debilidad cinéfila, junto al cine coreano. Ya hice una lista de mis villanos favoritos. Y me quedan otras por hacer: mis personajes secundarios favoritos, mis parejas favoritas, mis personajes masculinos favoritos, los femeninos... Pues hoy voy con ellas, con las chicas. Que hay vida más allá de las princesitas. Y algunas princesitas molan y os podrían dar una patada en el culo. He intentado ponerlas más o menos en orden de preferencia, aunque con algunas es difícil porque me gustan más o menos igual.

1- Esmeralda (El jorobado de Notre Dame)

Esmeralda está la primera porque es la más pivón mi chica Disney favorita con diferencia. Y además, me da rabia, porque cuando se piensa en chicas Disney y en las típicas pelis Disney, no nos solemos acordar de El jorobado de Notre Dame, que para mí es demasiado maravillosa, pero de eso hablaré otro día. Esmeralda me gusta porque quizá sea la chica Disney más adulta como personaje, y bueno, porque me encanta. A mí es que los personajes que van por ahí luchando contra la desigualdad social me suelen tener ganada ya. Esmeralda va por ahí dando discursos contra la intolerancia, pide el mismo trato para todos, denuncia las injusticias y encima le echa dos huevos porque se enfrenta a quien haga falta. Además, es la primera que trata a Quasimodo con el amor que se merece. Y bueno, en esta película yo creo que es en la única de Disney que se ha enseñado el deseo sexual (con ese Frollo cantando sobre su deseo por Esmeralda), y ella lo representa muy bien: está sexy y seduce, no se limita a ser la típica chica que es muy mona, pero que vive en un mundo piruleta dónde solo existe el amor y no la atracción.

2- Mulan


Mulan es un amor, eso está claro. Es de los personajes Disney más inteligentes, y también de los más valientes. Puede que sea torpe, puede que haya muchas cosas que se le den mal. Pero lo compensa con lo que he dicho antes, y dando una lección de sacrificio, perseverancia y de que las chicas podemos molar mucho sin necesidad de ser delicaditas. Además, lo que hace por su padre es precioso. Vamos, que la película y el personaje en sí es una reivindicación en toda regla de lo que es ser una chica que merezca la pena de verdad. Lo de que podemos valer más que los hombres ya sobra hasta comentarlo. Y me disfracé de ella hace poco en una fiesta Disney muy guay con gente muy guay, y eso suma puntos.

3- Rapunzel (Enredados)


Me encanta Enredados y me encantan sus dos personajes principales (estarán en mi lista de parejas, seguro). Creo que es fácil identificarse con Rapunzel en cierta manera: ese sentimiento cuando estás creciendo y quieres empezar a hacer tu vida y a tomar tus decisiones, pero esto choca con tus padres. Además, supongo que todos alguna vez hemos tenido la sensación de que estamos perdiendo el tiempo y que no estamos realmente viviendo la vida. Por otro lado, todos tenemos sueños, y ella busca perseguir el suyo. A todo esto le añades que es una monada y que tiene una de las mejores miradas de todo Disney que hace que sea todavía más tierna, y que tiene la inocencia de una niña y que no deberíamos perder nunca, aunque fuera una parte pequeñita.

4- Jasmine (Aladdin)


En realidad, este puesto y los tres siguientes es por poner un orden, pero podría haberlas puesto de manera diferente, porque tengo amor para las cuatro a partes iguales. Jasmine está en el bando de chicas Disney que aunque sean princesas, no son unas pavas y luchan por lo que quieren. En este caso, no quiere casarse con subnormales, y quiere conocer otro tipo de vida. Tiene bastante carácter, y cuidadito con no tratarla como se merece y con mentirle. Bueno, y si por la causa hace falta comerle la boca a Jafar (y, junto con Esmeralda y Megara, las únicas que creo que pone el modo sexy on), pues se hace. Para mí es de las más míticas, menos Cenicientas y Blancanieves y más como ésta, por favor.

5- Megara (Hércules)

Megara es bastante diferente: colabora con el malo de la película (si se puede considerar malo a Hades), y ya ha tenido pareja antes de Hércules. Así, estamos ante una chica que sí, que le hace tilín en seguida el chico de la película, pero que quiere resistirse porque la vida ya le ha dado golpes y ya le rompieron el corazón. A pesar de eso, al final acaba abriéndose y vuelve a tener fe de nuevo. La verdad es que contrasta lo experimentada que es ella con el pavo de crío que tiene él. Y bueno, Megara siempre me encantó. Creo que tiene su gracia, que es especial y un personaje bastante interesante.

6- Bella (La Bella y la Bestia)

Bella hace honores para estar aquí, aunque solo sea por esta razón: cómo rechaza a Gaston. Si Gaston existiera en la realidad, en la época actual, y fuera español, estaría concursando en Mujeres, hombres y viceversa. A Bella los musculitos como que le dan igual y solo ve su retraso mental; prefiere a alguien amor, aunque tenga mucho pelo en vez de músculos. Viva Bella. Es fácil identificarse, además, si has pasado mucho tiempo entre libros, o soñando con otros lugares porque a veces lo que está a tu alrededor no es lo suficientemente interesante. Y claro: ¡lee!, con lo cual, es un bicho raro. Vamos, como hoy en día, que si tienes cultura, la gente piensa que eres un rarito, porque mola ser un cateto. No obviemos lo que he dicho: es capaz de ver más allá del aspecto, pero para mí lo más bonito de esa relación es que ella consigue sacar lo mejor de alguien que en principio puede parecer un monstruo. 

7-Ariel (La Sirenita)

Ariel supone el principio de un nuevo tipo de princesas: antes era unas pavas que tenían que ser rescatadas por sus príncipes. Pero aquí, ella es la que toma la iniciativa. Muchos se quejan diciendo que lo único que la mueve es un chico (como si luchar por quien quieres fuera algo malo, se ve que si eres chica sí), pero hay que recordar que a ella les fascina el mundo que hay fuera del mar. Así que, está luchando por dos cosas. Puede que tenga actitud muy de cría a veces, pero yo creo que es parte de su encanto. Y que no todos nacemos siendo personas maduras, oye. Aún cuando pierde la voz, sigue manteniendo el carisma y yo creo que hasta se vuelve más adorable.

8- Boo (Monstruos S.A.)

¿Hace falta que diga algo de esta niña? Si no se os cae la baba con ella, no tenéis corazón. No habla (solo para decir gatito y hacernos morir del amor), pero es que es increíblemente adorable. Es un personaje muy tierno, y al mismo tiempo, muy sencillo. Pero a mí me roba el corazón cada vez que aparece.

9- Tiana (Tiana y el sapo)


Aunque es cierto que me gusta mucho más el chico de la película que la chica en esta ocasión, Tiana me cae muy bien. Quizá no la ame tanto como a otras, pero se ha ganado estar aquí. Tiana es independiente, es divertida, y es una princesa que se dedica a limpiar y a trabajar, pero no porque sea una desgraciadita obligada por una madrastra malvada. Trabaja porque es lo que hay que hacer para sobrevivir en el mundo real, y trabaja todavía más duro porque quiere cumplir un sueño. Yo podría aprender un poquito de ella...

10- Jane (Tarzan)


La verdad es que no sé explicar muy bien por qué me gusta bastante Jane, pero me gusta. Una cosa es seguro: el dibujo tiene que ver. Me encanta, la verdad. Pero bueno, más allá de eso, supongo que me gusta porque es bastante graciosa, y no es una chica tonta: también es independiente, es bastante entusiasta, es lista.. No es de mis grandes favoritas, igual que me ocurre con la película, pero Jane tiene algo.

Y hasta aquí la lista. Se me ha quedado fuera Mérida, de Brave. Quizá cuando vea la película más veces, llegue a entrar, porque he estado a punto de ponerla compartiendo puesto con Jane. Supongo que necesito cogerle un poco más de cariño, porque el personaje me gusta mucho.
Otras que me hacen gracia son Campanilla y la gatita pija de los Aristogatos, pero no soy tan fan. 
Ah, y por cierto: si hiciera una lista de personajes Disney femeninos que odio, Daisy ocuparía los 10 puestos.

lunes, 10 de diciembre de 2012

El rincón coreano: Sunny

De entrada, no me suelen gustar las películas de estilo buen rollero que tratan el tema de la amistad entre chicas. La mayoría suelen ser productos típicamente yanquis, y no me gusta ni el estilo, ni creo que reflejen lo que es la verdadera amistad, ni me gustan los estereotipos de chicas que aparecen. En este tipo de películas (y en otras, como las comedias románticas americanas), las chicas parecen bastante tontas. Se ve que solo nos gusta ir de compras, llevar zapatos monísimos, hablar mal de los chicos y toda la retahíla de tópicos que ha hecho que jamás me identifique con ninguna. Y la amistad resulta muy superficial.

Sunny trata el tema de la amistad, y de la amistad entre chicas. También tiene tono buen rollero. Vamos, sería la típica película de la que huiría si se hubiera hecho en Estados Unidos. Pero está hecha en Corea, y se nota. Si Corea me regaló la comedia romántica perfecta con My Sassy Girl, también me regala la mejor película sobre amistad entre un grupo de chicas que he visto, pese a los intentos de los americanos.

La película retrata la amistad entre un grupo de chicas del instituto, y su reencuentro en la edad adulta. Parece un poco típico, pero Sunny es una de esas películas que, dentro de lo aparentemente tópico de su argumento, sobresale y te ofrece algo distinto. La amistad entre el grupo de chicas es muy creíble, porque lo que enseña es lo que supone tener amigas a esa edad: las tonterías que haces con ellas, los líos en los que te metes, los ratos que se pasan juntas, los problemas que van surgiendo... Las ves, y te dan ganas de volver a esa edad y divertirte como se divierten ellas.

Además, los personajes no son idiotas. Gracias, de verdad. No son unas niñas cursis y tontas. Cada una tiene su personalidad, muy marcada. Hay algunos personajes que tienen menos peso y aparecen menos definidos, pero los importantes lo están. Y tenemos maravillas como la chica que solo habla con tacos, que es divertidísima; o la guapa del grupo, un personaje que mantiene el magnetismo y el misterio durante toda la película. La verdad es que, en conjunto, son un grupo muy carismático. Y esto es un detalle que puede parecer tonto, pero me encanta: se insultan, se llaman zorras, se meten en peleas con otras chicas. Puede parecer una tontería, pero me cansa un poco la imagen de chica delicadita, que parece que solo los hombres puedan decirse esas cosas entre colegas. 

La película me hizo recordar buenos ratos con amigos, y a acordarme de apreciarlos otra vez. Pero también me recordó que la vida y los años pasan, y que no todo sale según el plan. Y que hay gente que se nos queda por el camino.

Porque esta es el otro pilar de la película: además de la amistad, ya que la historia se mueve entre los momentos en el instituto y la actualidad de ellas en su edad adulta, Sunny nos enseña lo que hace el paso del tiempo. Los distanciamientos, y cómo la vida a veces no sale como planeas. Cuando eres joven, tienes sueños, y planes de futuro. Pero la vida pasa, y a veces, se nos olvida cumplir esos sueños. Echamos la vista atrás, y nos damos cuenta de que las cosas están saliendo de manera diferente. Y a veces, la vida de trunca de manera trágica. O podemos arrepentirnos de no haber vivido la vida que queríamos. Todo esto lo explica mucho mejor Sunny en una sola secuencia: cuando la protagonista ve un vídeo en el que cada una de las amigas habla a su yo del futuro, imaginando lo que serán. Ya conocemos cómo han acabado cada una de ellas, y en algún caso, el vídeo de esas niñas llenas de ilusiones te rompe el corazón sabiendo su destino.

A mí Sunny me hizo reír, y me hizo llorar. Me hizo reflexionar sobre mi propia vida, y es una de esas películas que de verdad me han hecho disfrutar: no es solo que sea entretenida o en algunos momentos emocionante, es que tiene algo especial. Un algo que te deja una sensación impagable cuando acaba la película, entre felicidad y nostalgia. 

Con muchas películas coreanas, me pasa que pienso que no debo recomendarlas para alguien que no está acostumbrado al cine coreano, porque creo que tal vez no puedan gustarles. Pero Sunny la recomiendo, y mucho, a cualquiera que quiera pasar un buen rato, y le apetezca ver una historia sobre la amistad y sobre la vida misma.

Nota: 9/10



PD: Como curiosidad... Muchas de las actrices que hacen de las chicas de instituto tienen más de 20 años, pero parecen unas crías de verdad. No como en España, que cogemos a gente de más de 30 para papeles de adolescente que no hay quien se crea.

miércoles, 5 de diciembre de 2012

Amour

"Y a medida que la contaba, la emoción volvía. Yo no quería llorar delante de ese muchacho, pero era imposible. Yo estaba allí, llorando en el patio, y le conté el drama hasta el final [...] No recuerdo el título de la película, pero recuerdo los sentimientos.Yo tenía vergüenza de llorar. Y al contarle los sentimientos, las lágrimas volvían, todavía más fuertes que cuando miraba la película."

Haneke nos avisa de lo que nos espera a la media hora de la película. Desde el primer minuto, se siente algo habitual con sus películas: esa sensación de intranquilidad, de que todo va a torcerse, de que quizá acabes sufriendo. A la media hora nos cuesta esa historia, y creo que es una de las mejores formar de definir Amour.

Hace cerca de dos horas que acabé de verla, y aún sigo como rota por dentro. Lo he leído en alguna crítica en Filmaffinity: es como si acabaras de salir de un funeral. He tenido que ponerme a escribir sobre ella para aliviarme, pero las emociones vuelven al pensar en ella. No sé si olvidaré la historia, pero sé que no olvidaré lo que me ha hecho sentir.

Haneke sabe hacer daño. Pero le doy las gracias. Amour duele, y duele tanto porque es extremadamente real. Es una historia de amor, pero de las que no necesitan artificios. De las de verdad, de las que no hace falta adornar con frases vacías. Una historia de amor que se prueba con hechos, y dónde puede encogerte el alma ver cómo dos personas se acarician la mano.


Pero es una historia de dolor y de muerte también. Es una historia dura, trágica, pero Haneke, de nuevo, no adorna. Ni cae en sentimentalismos baratos, porque no es necesario. Basta con lo que nos enseña. Y cómo nos lo enseña. Insisto: es extremadamente real. Aquel que haya vivido una situación similar a la que se muestra en la película, sabe que es muy real. Y por eso duele tanto. Y supongo que quien no lo haya vivido, también sabrá que es real. No puedo contar las ocasiones en las que me he echado a llorar. Pero no con simples lágrimas, sino sintiendo angustia, notando el dolor. Hacia el final, me preguntaba cuándo acabaría para dejar de sufrir, lo cual es bastante paradójico teniendo en cuenta la historia que se cuenta.

Nos duele lo que vemos porque es real. Porque duele ver a alguien pasar por algo así. Y duele, también, porque la muerte es algo inevitable. Unos tienen más suerte, pero otros tienen que atravesar por un deterioro horrible, y otros tienen que sufrir como la persona a la que quieren lo sufre. Y da miedo. Porque la vida es larga, y bonita, como dice Anne. Pero  de repente, un día, la vida comienza a oler a muerte y no se puede hacer nada por remediarlo. 

Y antes de acabar, mención especial para los actores. Él, Jean-Louis Trintignant, está genial. Está muy creíble, parece que lo que hace sea muy sencillo. Pero ella, Emmanuelle Riva, está todavía mejor. Sin palabras. 

martes, 20 de noviembre de 2012

Parejas De Cine: Sam y Suzy (Moonrise Kingdom)

Sam y Suzy son perfectos, y eso se sabe solo con mirarlos. Se sabe, porque la ves a ella, con sus prismáticos y sus vestidos, y a él, que parece más pequeño, con su traje de Scout, y no se puede negar que algo especial deben de tener. De ser. Los dos, probablemente por separado, pero más todavía los dos juntos.

 Y entonces los ves en una especie de Nunca Jamás improvisado: la entrada a los adultos no está permitida, y los niños toman el control. Siguen sus propias reglas. Y el núcleo de ese Nunca Jamás son ellos dos. Quizá se pueda pensar que la historia de dos niños de doce años enamorándose puede ser un bonito cuento, pero solo eso, un cuento. Son niños, al fin y al cabo, qué van a saber ellos del amor.

Y yo digo que quizá el amor, el amor de verdad, tenga mucho que ver con ser un niño. Y Sam y Suzy son el mejor ejemplo de ello. Son el ejemplo de un amor puro, inocente y sincero. Se fugan juntos, aprenden a convivir. Se respetan, y quieren conocerse el uno al otro. Disfrutan de su compañía y prueban cosas nuevas: ya sea bailar en ropa interior en una playa solitaria, que sentarse junto al fuego de noche, mientras ella le lee una de sus historias favoritas, y él escucha mientras fuma en su pipa.

Se necesitan el uno al otro. Con doce años, ya se puede haber tenido tiempo de comprobar que la amistad no es algo sencillo, y que la soledad puede ser dura. Pero si se tienen el uno al otro, no están solos. Y los prejuicios sobran, y no importa lo que digan los demás. Se quieren, y quieren llegar a quererse más y a compartir más tiempo juntos. 

Aún están a tiempo de hacer locuras. Están muy lejos del tener que pensarse mucho las cosas por miedo a las consecuencias, o de retrasar la toma de decisiones porque "es muy precipitado" o "es una locura". Ellos pueden cometer locuras, y decisiones sin pensarlas demasiado. Eso no significa que sean precipitadas: así lo sienten, así actúan. ¿Y quién tiene derecho a decirles que lo que sienten no es amor, si están dispuestos a todo por estar juntos, y a sacrificarse el uno por el otro, o preferir morir a vivir el uno sin el otro? Aunque quizá no se entienda mucho lo que de verdad significa morir, da igual. 

Sam y Suzy sí saben lo que es ser una buena pareja, y lo que es el amor. De verdad. Y es que el amor tiene mucho de recuperar esa inocencia, aunque nuestra voz adulta a veces nos hable demasiado alto, y tengamos miedo o nos perdamos muchas cosas por pensar demasiado. Pero si tienes a alguien con quien bailar en la playa de forma absurda, el mundo se parece un poco más a Nunca Jamás, y se convierte un lugar mejor.


miércoles, 14 de noviembre de 2012

Momentos: Shaun of the dead (Zombies party)

El otro día vi Paul, que aunque tampoco me pareció gran cosa, como siempre adoré ver a Simon Pegg y a Nick Frost juntos.
Esto ha provocado que crea que voy a morir esperando para la nueva película de Edgar Wright, dónde los dos vuelven a ser la pareja protagonista. El guión es de Wright y Pegg. Se estrena, en teoría, en verano del año que viene. Así que, como todavía no puedo ver nuevo material, pero estoy muerta de ganas, tengo mono de este trío, y me apetece volverme a ver las tres películas de Edgar Wright, que son demasiado maravillosas. El único fallo que tiene Scott Pilgrim es que Simon Pegg y Nick Frost no aparecen. En serio, deberían haber hecho un cameo como policías veganos.
Aún no me he puesto a volver a verlas, pero estoy quemando youtube viendo escenas de las películas. Que como siga así, no va a hacer falta que las vuelva a ver, que las estoy viendo a trozos.

De Shaun of the dead se podría rescatar prácticamente cualquier escena. Supongo que a estas alturas no hace falta que explique que es una parodia sobre las películas de zombies, y que tiene demasiados momentazos inolvidables. A cada momento, hay un gag, que ridiculiza por completo los tópicos de estas películas. Y a pesar de esto, casi consigue ser más realista: antes que pensar que la tía rara de mi jardín es un zombie, quizá yo también pensaría que está borracha. No creo que sacara mi escopeta y me convirtiera de repente en una experta killer-zombies. 

En mi memoria siempre estará la escena en la que Shaun (Simon Pegg) sale a la calle cuando ya se ha extendido la epidemia, y ni se da cuenta aunque los zombies le rodeen; el momento en el que el grupo decide evitar el ataque de los zombies haciéndose pasar por ellos; Shaun elaborando sus planes confiando en que todo se solucionará pronto (y, por supuesto, nada acaba saliendo como espera); los vinilos como armas mortales; las reacciones de la pareja protagonista a los encuentros con los zombies... y cómo olvidar el Winchester. Y la lucha que se da en él. Poco heroísmo épico, pero una lucha muy divertida, torpe y con Queen de banda sonora. Así que, entre todas las escenas que podría poner, hoy pongo esta. 

Los vídeos que he encontrado en youtube tienen la inserción desactivada, así que, click aquí para verla.

Simplemente, genial. Vivan Edgar Wright, Simon Pegg y Nick Frost, sobre todo cuando se juntan. La sagrada trinidad británica. Se merecen algún especial, quizá algún día. 

Por cierto, ya que estoy con el mono, tal vez aproveche para ver la serie Spaced, que aún no la he visto y la tengo en mi poder desde hace bastante. Tengo las expectativas altas, ¿alguno la habéis visto?

miércoles, 31 de octubre de 2012

Star Wars Episodio VII

Supongo que a estas alturas todos conocéis la noticia de la compra por parte de Disney de Lucasfilm, y el anuncio de una nueva película (seguramente, trilogía, o saga, o lo que salga) de Star Wars, el Episodio VII, que llegará en 2015. 

Yo adoro Star Wars desde que era pequeña, así que, soy una de tantos que está comentando la noticia desde esta noche y dando su opinión de freak de forma muy apasionada, como si me fuera la vida en ello. Que casi. Yo os invitaba a todos a debatir sobre esto mientras jugamos a mi Monopoly de Star Wars y hago que Darth Vader expanda su imperio urbanístico por toda la galaxia.
Bien, he leído a algunos que tienen esperanzas en esta nueva película, porque creen que George Lucas hará algo bueno. A ver si leemos más y mejor las noticias: George Lucas no va a pintar nada en esto. Están, ahora mismo, viendo a ver qué se inventan para la nueva película, y Lucas ya ha declarado que lo deja todo en manos de Disney. Que desarrollen su franquicia, dice. Y que solo contará si se le consulta algo en el aspecto creativo, y que esta venta y este proyecto suponen su fondo de jubilación. Por si alguien dudaba de las motivaciones de Lucas y de sus intenciones con respecto a la saga.

Bueno, pues yo me declaro una fan de Star Wars enfurecida. Sé que hay material para contar historias nuevas. Lo hay en cualquier mundo fantástico creado en la ficción. Pero para mí, Star Wars son las dos trilogías ya hechas. Y eso que la trilogía nueva deja mucho que desear, que no estoy del todo convencida de cómo se ha contado la primera parte de la historia. Pero es la historia de Star Wars, que queda cerrada en el episodio VI. ¿Qué van a contar ahora?

Me imagino a J. K. Rowling sacando un nuevo libro de Harry Potter sobre los hijos de Harry, Ron y Hermione, y me cabrea bastante. A mí no me interesan los hijos de los protagonistas, pero nada. Y eso que estaría escrita por la autora. Quizá sí me gustaría algo así como una precuela, centrada en algún personaje secundario que salió poco y que sí da para contar cosas. O ella escribiendo una historia con personajes diferentes, pero centrada en su universo. En cualquier caso, si escribiera una nueva historia con nuevos personajes, para mí eso no sería Harry Potter. Sería una nueva historia basada en Harry Potter.
Y repito, en esos casos, sería la creadora de Potter la que haría la nueva historia. En este caso, George Lucas no va a hacer nada. Así que, estoy todavía más en desacuerdo. No pongo en duda la calidad de una película de la que todavía no sé nada. Pero para mí eso no va a ser Star Wars. Aunque sigan metiendo a R2D2 aprovechando que no necesitan actores y que no puede morir. Una historia que se van a inventar después de decidir que habrá película sí o sí, cuando la historia ya se cerró, y sin que el creador de Star Wars pinte nada... No es Star Wars. Es una historia nueva, que puede estar bien, que nació gracias a Star Wars. Pero a mí eso de llamarla Episodio VII me cabrea, y mucho. Aunque haya material de sobra. Sé de la existencia de las novelas. Pero es que volvemos a lo mismo: esas novelas no son de Lucas. Hay fanfics de mil historias que tienen muy buena calidad, pero cuando los leo no los pongo al mismo lugar que el de la historia original.

En fin, que para mí, Star Wars, ya tuvo su principio y su final. Que una historia sacada de la manga solo para recaudar dinero, y que digan que es un nuevo capítulo de una historia cuando no es así, me disgusta. Ya veremos la película que tal, pero aunque llegara a gustarme... Star Wars fue lo que fue. Y como me pongan a los hijos de Luke, Leia y Han Solo ya es que me parto. El problema más grande para mí, es básicamente, que esto vaya a llevar el nombre de Star Wars y la coletilla de Episodio VII.

Lo único que podría levantar mi ánimo sería que de verdad Disney metiera mano. Pero mucha. Hasta el punto de llegar a algo así:


Como fan de Disney y de Star Wars, una versión de Disney de la saga de Lucas me haría mucha gracia si se hiciera bien. Podría ser algo curioso, amor si pusieran ganas, y la historia original quedaría intacta. Anoche ya empecé a pensar en el casting ideal. Donald (mi gran amor) debería ser Han Solo, porque se merece un papel protagonista y los dos son amor y tienen mala leche, aunque le quede muy bien el disfraz de soldado imperial. Mickey sería Luke, por ansias de protagonismo a pesar de la sosería y el pavo; y Minnie Leia, claro. Daisy alguien que muriera rápida, y a poder ser, dolorosamente. Goofy debería ser C3PO. Stitch debería tener un doble papel: como Yoda, porque está demasiado adorable, y como Palpatine, que su versión malvada no se puede desaprovechar. Pero aún me quedan muchos personajes por atribuir... ¿Y Darth Vader? La verdad es que a Donald también le pega, pero creo que me gusta más de Han Solo. ¿Y Obi-Wan Kenovi? ¿Y R2D2? Tendría que pensarlo más. Como me aburra y me dé por pensarlo seriamente, o me inspiréis con vuestros castings ideales en los comentarios, hago una entrada solo sobre la película Disney de Star Wars que desgraciadamente no veremos nunca. 


Y antes de acabar, no todas las noticias sobre Star Wars causan profundas depresiones. El 8 de Noviembre sale Angry Birds, versión Star Wars. Hoy ha salido un nuevo vídeo, que os dejo aquí:




Esto sí que me encanta. Quiero jugar ya.

Ahora sí, ya me despido. Pero os invito a que en lugar de celebrar Halloween, celebréis un finde-puente de Star Wars. Quizá necesitéis acompañarlo de chocolate como yo para superar la tristeza que me invade.

viernes, 19 de octubre de 2012

Los juegos del hambre

Voy a hablar exclusivamente de la película, aviso desde ya. Por si acaso algún fan del libro viniera a odiarme defendiendo las novelas, sólo he visto la película, y es sobre lo único que voy a hablar.

Poco antes de que se estrenara, me empezó a saturar mucho la publicidad de Los juegos del hambre, y me dio por leer de qué iba. Y fue cuando me cabreé: un grupo de niños-adolescentes debe luchar a muerte hasta que solo quede uno, el ganador del juego. Me cabreé porque me he cansado de ver cómo gente dice, al conocer de qué va Battle Royale, que es una frikada. Pero esto lo hacen los americanos y todos deseando verlo. Así que, se puede decir que no empezamos muy bien nuestra relación. Y tampoco ha acabado bien.

 Me decidí a ver la película, con ese rintintín de que la maravillosa coincidencia de argumento con Battle Royale, pero esperando que por lo menos, me entretuviera durante las más de dos larguísimas horas que dura. Y empieza, y medio me sorprende. "Tampoco está tan mal, es un poco chorra, pero entretiene", pensé. El tema de la historia de la hermana es previsible, y hay un tío este que sale con ella en su distrito que sobra totalmente. Supongo que en la segunda película entrará en acción y las fans se pelearán al estilo Team Jacob - Team Edward, pero en esta no pinta absolutamente nada.

Pero a pesar de esto, estoy entretenida. Al final de esta parte, ya estaba deseando que empezara ya el juego, que así por lo menos veía a gente matarse. Tenía ganas de ver eso, ya pensaba que la película me iba a gustar más de lo esperado. Qué ingenua fui.

Fui una ingenua, pero cuando haces una película sobre un sistema que obliga a que chavalitos se maten entre ellos a muerte, pues espero ver esa crudeza. Pero los señores responsables de esta película querían hacer una película sobre chavales matándose dónde no se vieran muertes. Ajá. Querían una película apta para un público amplio. Es una película cobarde y absolutamente decepcionante.La primera escena, cuando comienza el juego, es de vergüenza. Los adolescentes se empiezan a matar entre ellos, pero decidieron meter la cámara en una lavadora para que no viéramos nada. Marea, molesta. Total, que se acaba la primera super matanza, y aquí como si nada. A partir de entonces, la película se vuelve estúpida y aburrida hasta límites insufribles.

Que no están peleando a muerte. Que a mí no me engañan. Que parece que estén de excursión. Parecen unos Boys Scouts. Y eso que iban avisados de que la mayoría de gente moría ya no por asesinato, sino de hambre, enfermedades... Qué va. Esto es lo más. Yo me apuntaría para desconectar, y de paso cargarme a todos los personajes, que son unos palurdos. 

Tenemos a los típicos personajes de relleno que se supone que tienen que conmovernos que todos sabemos cómo acabarán. Y tenemos a los que se han apuntado habiéndose entrenado duro. Supuestamente son unas máquinas de matar. Algo así como el que se apunta por diversión en Battle Royale (otra feliz coincidencia argumental). Pues no. Son los típicos abusones del cole con menos luces que un semáforo que se dedican a robar los almuerzos. Por supuesto, no demuestran ningún tipo de habilidad. La escenita del árbol es ya lo más. Aunque son los más malotes del lugar, se sienten amenazados por la protagonista (Jennifer Lawrence), y quieren liquidarla. La tía se sube a un árbol y no son capaces, siendo tropecientos y cada uno con armas, de hacerla bajar. No, es mejor quedarse a dormir y esperar a que baje. No había otra manera, teniendo en cuenta que hay más gente y van sobrados de comida, pues vamos a desperdiciar horas y horas porque son lelos. Es que se desperdician flechas. Que no aciertan. ¿Pero no eran lo más? En cambio, a la protagonista jamás se le acabarán las flechas. Nunca, nunca.


Luego está el tema de la historia de amor, que me da la risa de llamarla así. Pues nada, que por meter un beso en la película, ya hay amor. Porque otra cosa no hay. No hay ningún sentimiento, no hay nada que te haga creer que de verdad se han enamorado. De repente, escenita romántica, y te lo tienes que creer. Pues no.

También hay otros enormes fallos, como que en la primera mitad de la película solo se hable de la importancia de caer bien y de los patrocinadores, que te enviarán ayuda y así podrás sobrevivir. Pues solo mandan una sopita y una crema milagrosa que te cura instantáneamente las heridas, sean cuales sean. Que total, la herida que tenía tampoco era de muerte. ¿Para qué se pasan una hora de película dando el coñazo con eso si luego no son nada importantes?

Sobre lo de la crema milagrosa, ya sé que es una sociedad futura y es ciencia ficción...pero, simplemente, hay muchas cosas que no me creo en esta película. Lo intento, pero soy incapaz de creérmelas. Me imagino a los dos comentaristas de televisión comentando las 24 horas al día el reality. Que el que maneja el cotarro esté también las 24 horas mirando todo lo que pasa, y añadiendo peligros. Que esa es otra, los peligros que añaden y la forma en la que lo hacen... Y las cámaras. Que debe de haber una en cada hoja de cada planta, porque vamos. Y micros igual. Tampoco me acaba de gustar con la facilidad que aceptan ir a morir al juego este. Y tampoco soy muy fan de cómo va cayendo todo el mundo, que ni te enteras, ni los conoces a todos, ni nada de nada. Ni de que se vaya sobreviviendo sin hacer nada y a base de una chorra bastante inverosímil. 

Y el final es de traca ya. SPOILERS: Los bichos esos enormes que aún no sé qué son. Lo previsible de que digan que puede sobrevivir una pareja, para luego, que en u super clímax que dura 30 segundos, se diga que no, que solo puede quedar uno. Entonces, deciden suicidarse (es que se quieren mazo, tía), pero no, en seguida rectifican y dejan que ganen los dos. ¿Pero qué coño es esto? Ya no es por ser predecible todo, es que es absurdo cómo en dos segundos se hace un giro para volver a cambiarlo dos segundos más tarde. ¿Qué tipo de tensión creas con esto? FIN SPOILERS. 

En fin, lo único positivo que destaco es que la primera parte es entretenida. Y que la idea del reality llevado al extremo es interesante, aunque creo que desaprovechan esta idea, y se podría haber sacado mucho más. El resto...pues ya lo he dicho todo. Lo mejor que podéis hacer si queréis ver esta película, es ver Battle Royale. Y si no la queréis ver, pues también. Aunque ya la hayáis visto, Battle Royale se ve todas las veces que haga falta. Yo rezo porque en la segunda parte salga el que se apunta por diversión en la película japonesa. Se los carga a todos en un momento. Saldría un cortometraje bastante mejor que esta película.

lunes, 15 de octubre de 2012

Series: Érase una vez (Once Upon A Time) (Temporada 1)

Una de mis debilidades cinéfilas es Disney. Y, por otro lado, los cuentos y las historias siempre me han gustado mucho. Incluso ahora. A veces, cuando una película me ha gustado mucho, y tiene cierta magia, una de las cosas que digo para justificar que me ha gustado es que "es como un cuento". Por tanto, Érase una vez era una serie que tenía muchas papeletas para gustarme: cuentos tradicionales de la infancia, otros que conocí gracias a Disney... Sin embargo, para resumir mi impresión de la serie, utilizaré la frase que me dijo una amiga cuando le pregunté que qué tal estaba: es una serie para ver mientras te pintas las uñas.
Mientras te pintas las uñas, o haces otra cosa con la que a veces te pones la televisión mientras para distraerte o hacerla más amena. O, simplemente, típica serie que ves en un momento de aburrimiento total, en el que sólo te apetece algo que te entretenga un rato. 

Por un lado, la parte fantástica, la de los cuentos, a veces funciona, pero otras muchas no. En general, suele gustarme más la parte del capítulo ambientada en los cuentos, pero no siempre. Cada dos capítulos más o menos, hay un capítulo dedicado a Blancanieves y su príncipe. Y esos capítulos son un verdadero aburrimiento. La única parte positiva que le encuentro a esos capítulos es que Blancanieves al menos no se dedica a barrer, y que te muestra la diferencia entre los cuentos y la realidad: el príncipe en el cuento es lo más, pero en la realidad es un imbécil, cobarde, egoísta y mentiroso. Hay otros que son más interesantes, porque la historia está conseguida o porque le dan una vuelta disntita a la historia que todos conocemos, pero parece que todo se fastidie un poco cuando vuelven al mundo, llamemosle, real. Además, hay capítulos de relleno: por ejemplo, hay uno dedicado a Hansel y a Gretel. La parte del cuento está bastante bien, pero la trama del mundo no mágico es un coñazo, y se sabe desde el primer segundo cómo va a acabar. Y también se sabe que son dos personajes que no van a pintar nada en la serie (de hecho, ni vuelven a aparecer), por lo que es un capítulo con el que la serie no avanza en absoluto.


Y hay otra cosa que no encaja en los cuentos, y que puede aplicarse también a la parte no fantástica de la serie. Los personajes no dejan de hablar del amor verdadero, y de que el amor es la magia más poderosa del mundo. Si bien tolero este tipo de cosas en películas como las de Disney, dichas por personas de carne y hueso suenan ridículas y cursis, como la propia Disney demostró con su película Encantada La Historia de Giselle, dónde una princesa Disney actuando como tal en nuestro mundo resultaba muy absurda. También me puedo creer en Disney que pase como en La Sirenita, que Ariel se enamore de Eric a primera vista, y que él se enamore de ella sólo con escucharla cantar. Pero aquí no me lo trago. 

Por otra parte, a mí me costó casi 20 capítulos encontrarle un poco de interés a la trama. Es absolutamente previsible: que alguien de repente resulta que estaba aliado con alguien...era de esperar; que alguien abre una caja que se supone que contiene algo super sorprendente, pues ya sabes lo que hay antes de que te lo enseñen. No hay emoción también porque avanza muy lentamente, y porque los personajes tampoco hacen que te metas en la historia. El niño es un cansino que llega a ser repelente, la protagonista es la típica dura que todos sabemos qué acabará haciendo (y cansa esperar que lo haga), Blancanieves es sosísima, la mala se supone que debería despertarme odio por ser tan malísima, o adoración por ser tan buena mala, pero me deja totalmente indiferente lo que haga o deje de hacer. El único personaje que me parece interesante es Mr Gold/Rumpelstilskin, interpretado por Robert Carlyle. Siempre me gusta ver a este hombre, y destaca por encima del resto de actores y de personajes por mucho. Su historia es la única que realmente me interesa.

En conclusión, una serie flojita, con algunos buenos momentos, pero que tiene demasiadas cosas para mejorar para ser una buena serie. Los mejores capítulos de esta temporada para mi gusto, el último, el de Caperucita, el del Sombrerero Loco y el la Bella y la Bestia. Éste último me hace enfadarme y preguntarme por qué la serie no se parecerá más a ese capítulo, o al menos acercarse un poco a ese nivel. Mi capítulo favorito. Recomiendo la serie si os gustan mucho los cuentos, porque si este tipo de historias no os atraen, dudo mucho que soportéis la serie. Yo seguiré viéndola porque me salva ratos de aburrimiento, que ahora tengo muchos. Pero van tres capítulos de la nueva temporada, y el tercero ya me ha aparecido de relleno y aburridísimo. 



miércoles, 10 de octubre de 2012

(Encuesta) La mejor trilogía es...

Ayer se cerró la encuesta que abrí en el blog para escoger la trilogía favorita, y dejo aquí el TOP 5 (en realidad, TOP 6, porque hay empate) de los resultados:

1. El señor de los anillos (7 votos)


2. Star Wars (Episodio IV al VI) (6 votos)


3. y 4. Toy Story y El Padrino (4 votos cada una)


4 y 5. Regreso al futuro y Batman de Christopher Nolan (3 votos cada una)



Con algún voto, se han quedado fuera Indiana Jones, X-Men, Spiderman de Sam Raimi, la trilogía de la venganza de Park chan-wook, la del dólar de Sergio Leone, Matrix, Evil Dead e incluso alguien se atrevió a votar los tres primeros episodios de Star Wars.

Sobre los resultados, en mi opinión, pues...me entristecen un poco. Matadme queridos y multitudinarios fans de El señor de los anillos, pero no me entusiasma. No me parece que sean malas películas, pero me parece que están bien y ya. Así que, ver que está en el primer puesto y que Indiana Jones se haya quedado fuera...me duele. Otro resultado que tampoco comparto, y sigo haciendo amigos, es Batman de Nolan. Algún día me atreveré a hacer crítica de El caballero oscuro, y me ganaré haters. Será amor. No me gusta el Batman de Nolan. Tampoco me parecen malas películas, pero no me gustan. A falta de ver la última, todo hay que decirlo. Ya daré mis razones el día que quiera ganarme el amor de todos los fans de Nolan.

Mis elecciones habrían sido las siguientes (sin orden):

Star Wars (Episodio IV al VI): Coincido con los resultados en este punto. Me he criado viendo Star Wars, queriendo un Halcón Milenario, queriendo ser jedi y claro, como es natural, he desarrollado la vena freak. Viva Star Wars.

Indiana Jones: En serio, ¿El señor de los anillos y Batman de Nolan e Indy no? Lloro. Otra trilogía que ha ocupado mi infancia. Y con el paso de los años, la sigo amando. Este tipo de películas de aventuras me pueden. Indiana Jones es un personaje perfecto, y todos debemos amar a Harrison Ford. Es que son maravillosas, no sé qué hago dando razones para apoyar a Indy. Indy for president. Y Aragorn y Bruce Wayne pueden ponerse a sus pies, que seguro que Indy les vacila como él sabe y consigue quitarles alguna reliquia para llevarla a un museo.

Regreso al futuro: Por añadir la última que ha estado presente en mi infancia. Aunque las dos anteriores las he visto más veces y con más regularidad. Esta volví a verla hará un par de años, y llevaba muchos años sin verla. Marty McFly y Doc, os quiero. Mucho.

La trilogía de la venganza: Tengo debilidad por el cine coreano. Oldboy es mi película favorita. Park chan-wook es uno de mis amores cinéfilos más intensos. Mi nick es Lady Vengeance. Así que, esta trilogía es de mis favoritas sí o sí. Sympathy for Mr Vengeance, Oldboy y Sympathy for Lady Vengeance. Tres maneras diferentes de tratar la venganza, tres películas diferentes y que me dejaron con la boca abierta. Park chan-wook es un genio y aquí lo demuestra de sobra. Siempre me sorprende, y me sigue sorprendiendo cómo pudo tratar la venganza de manera tan original y de maneras tan diferentes. Y cómo de paso se ríe de mí jugando con mi moral como nadie. Además de estas películas, se podría añadir su corto de Cut, en el que la muestra de manera irónica, riéndose de todos los tópicos y de sí mismo.

El Padrino: A estas alturas no me voy a poner yo aquí a comentar en cuatro líneas por qué mola El Padrino. Solo decir que a mí la tercera me gustó mucho. Creo que está por debajo de las otras, pero que es una muy buena película igualmente. Y el final me parece perfecto.

Toy Story: Lo mío con esta trilogía es curioso, porque siendo una amante de Disney, Toy Story no era de mis favoritas. No la tenía de pequeña, así que la había visto poco. La volví a ver hace años, y me quedé enamorada. Y para rematar, sacaron la tercera parte, que para mí es la que hace esta trilogía todavía más especial. Podéis leer mi opinión sobre esa película aquí.

Y eso sería todo. Solo que creo que tengo un problema con las trilogías, porque las cuatro que tengo en DVD...ninguna la tengo completa. De dos solo me faltan una (culpa de la tienda, que les faltaba una), y de otras dos solo tengo una. Necesito más dinero para comprar más DVD'S. 

miércoles, 3 de octubre de 2012

Party Monster

Me encanta eso de ir haciendo zapping por la tele, encontrarte una película rara o malísima para morirse, y quedarse a verla. Ya empieza a ser tradición para mí y para cierta persona. 
La última vez que me dediqué a esto, esa persona y yo nos encontramos con Party Monster. Bueno, nos encontramos con Macaulay Culkin en pantalla, con pinta de gayer. La televisión nos informaba de que era una película de culto basada en hechos reales, y, que además, acababa de empezar. Planazo de domingo por la noche.
Como estaba basada en hechos reales, concretamente, en la figura de Michael Alig, yo consulté en Wikipedia, porque ni idea de quién era ese tío. Si estáis como yo, pues Wikipedia es vuestra amiga. Pero resumiendo, es un tío que se hizo famoso en la noche de Nueva York por las fiestas que montaba con su Club Kids, dónde se reunía gente super alternativa y diferente; y que acaba drogándose y metido en líos bastante gordos.
Y menos mal que miré Wikipedia. Porque la verdad, el hilo narrativo de la película es...especial. Que en una escena está Macaulay Culkin con una fiesta a la que van tres personas, y a los dos minutos ya es super famoso y sus fiestas son las más guays de Nueva York. Macaulay Culkin odia a la droga. 3 minutos después, ya es un yonqui. Y así todo. 
La película está rodada de esa manera que parece decir a gritos: hey, esto es cine de autor, estoy haciendo algo único, guay, cómo molo. Y parece que todo el presupuesto haya sigo gastado en contratar a las personas que aparecen en ella y en los trajes que se ven en la cinta.
La verdad es que uno de los entretenimientos de Party Monster es empezar a reconocer a todos los que salen: que si Seth Green, que si mira a esa tía que me suena mucho y luego resulta que ha hecho mil películas (como Kids), que si el jefe de Macaulay es el padre de American Horror Story, que si sale Fed de Aquellos maravillosos 70 (ya sabemos cómo Macaulay conoció a Mila Kunis para después estar juntos), que si el tío Jesse de Padres Forzosos hace de presentador de televisión... ¡si hasta sale Marilyn Manson! Haciendo de Christina. 
Sobre los trajes que aparecen en la película, otra cosa no, pero originales son. Que yo no me los pondría para salir por la calle, pero oye. Que para lo que ellos los quieren, están muy bien. Google Imágenes me reveló que el vestuario está basado en la realidad, lo que ya no sé es cuánto hay de creación propia y cuánto del verdadero Michael Alig y amigos. Vamos, que si a Lady GaGa se atreven a llamarla artista por ponerse las dos cosas más cutres y horteras que encuentra, los de esta película se merecen su propio museo. Le dan mil vueltas. Pero todavía hay quien se cree que la GaGa es super innovadora y transgresora. Pero eso es otra historia.
Volviendo a Party Monster, pues bueno, vamos recorriendo un poco la vida de Michael Alig, aunque ya digo que con saltos temporales para mí bastante mal llevados. Fiesta, mariconeo, trajes de reinas de carnaval, drogas e idas de pinza. Entonces,¿cuál sería mi valoración final? Pues me cuesta aclararme. Me pareció una chorrada y una película mala, pero increíblemente entretenida. Seguramente la compañía tuvo algo que ver, estoy convencida de que si la hubiera visto sola, tendría sensaciones diferentes. 

 Por otro lado, me reí bastante (aunque no porque la película me pareciera graciosa, me hacía gracia, que no es lo mismo), y Macaulay Culkin amanerado se ha ganado un lugar en mi corazón. Como, extrañamente, se lo ha ganado la película. No me gustó, pero...le he cogido cariño. Por supuesto, esta entrada dedicada a esa persona, que está igual que yo: le dio un 3 en Filmaffinity, pero si le regalara el DVD (que sólo encuentro en Amazon) sería la persona más feliz del mundo. 

viernes, 28 de septiembre de 2012

El rincón coreano: El hombre sin pasado (The Man From Nowhere)

Para los que nos gusta el cine coreano, duele ver cómo hay tantas películas que no llegan nunca a nuestro país. Sin ir más lejos, yo sigo pensando que es increíble que jamás se haya editado en DVD My sassy girl. Mi amada Oldboy estuvo descatalogada durante bastante tiempo, por ejemplo. Así que, cuando llegan noticias de que alguna sí vamos a poder disfrutarla, pues a una le alegran bastante.

Gracias a Media3 Estudio, se llegó a estrenar en cines (¡en cine y todo!) El hombre sin pasado (The Man From Nowhere) y también llega en DVD. Gracias, de verdad, a la distribuidoras que hacen posible que nos vayan llegando nuevos títulos coreanos. Esperemos que con el paso del tiempo, lleguen más y más.

Y ahora, al lío. El hombre sin pasado es un thriller coreano dirigido por Lee Jeong-beom. Tengo debilidad por el cine coreano, sí. Y, especialmente, por los thrillers coreanos. La tengo porque Corea ha conseguido sorprenderme muchísimo con este género. Es una de las cosas que me gustan del cine coreano, y que en este tipo de películas, está muy presente: no sabes qué va a pasar. Tienes la sensación de estar viendo algo diferente, novedoso. Tienes la sensación de que la película podría ir por cualquier lado, que podría pasar cualquier cosa. A eso hay que añadirle la intriga y la emoción que tienen estos thrillers, o también la parte humana y emocionante que le aportan. Tienen alma. Y al final, sí, acaban sorprendiendo: por cambios en típicos planteamientos, giros, el propio argumento, o simplemente por cómo está contada la historia.

Sin embargo, esto no es algo que creo que tenga El hombre sin pasado, y para mí es su mayor fallo. Le exijo bastante al cine coreano, y más en estas películas, supongo que es mi problema. La película no cuenta una historia nueva, y la verdad es que se mueve bastante en lo predecible y en lo que se espera de una historia así. Pero esto no quiere decir que no me gustara, al contrario.

Me gustó mucho. Porque a pesar de no aportar nada nuevo, tiene algo. Quizá no algo tan especial como otras películas que sí me sorprendieron o me llegaron más, pero es una buena película. Aunque el argumento nos pueda sonar a películas como Leon, consigue enganchar. Aunque intuyas qué puede ir sucediendo, quieres verlo. 

La relación entre los dos protagonistas, la niña y el hombre sin pasado, cumple. Ella despierta ternura, y él es el perfecto solitario de buen corazón que tiene que ayudarla y salvarla. Queremos, necesitamos, que lo haga. Incluso algún momento entre los dos puede llegar a tocar la fibra sensible.



El actor protagonista, Won Bin, me gustó bastante en el papel. Le queda bien. Gana cuando decide asumir su papel de guapo y ponerse a repartir caña como debe. Tiene carisma cuando lo hace, y a mí me cae simpático. Quieres que siga repartiendo y no pare hasta lograr su objetivo. Y la verdad es que las escenas de acción son muy buenas. Aquí está en la tónica del cine coreano: aquí no hay americanos maricas que se pegan tiros y ya. O que se pegan a puñetazo limpio, pero te da la sensación de falsedad. No, las peleas del cine coreano son sucias, son bestias, duelen. Son a muerte, y algún día haré una lista de las inusuales armas que se usan para pelear (en esta, por ejemplo, al principio de la película, se usa una planta. ¡UNA PLANTA!). Destaco sobre todo la pelea final de uno contra todos, y la posterior pelea a navaja. Genial. Son las escenas que guardo más en mi memoria.

En conclusión, reitero: es una buena película, muy recomendable para pasar un buen rato si os gustan los thrillers de acción. Tal vez no inventen nada nuevo, pero es muy entretenida, y yo creo que consigue meterte bien en la peli gracias a la niña y del uso del protagonista enfrentado a todo el mundo a los que quieres que haga sufrir.

PD: Recordad que aún podéis votar en la encuesta por vuestra/s trilogía/s favorita/s.

martes, 25 de septiembre de 2012

Encuesta: Trilogías

Mira que volver a abrir el blog e irme de viaje sin que me diera tiempo a dejarme ninguna entrada preparada... En fin. 

Pero ya he vuelto, y continúo por aquí. Tenía pensado desde hace milenios introducir encuestas en el blog de vez en cuando, y ya tenía la primera pensada, pero como lo abandoné...pues eso. Empiezo las encuestas con trilogías.

He hecho una selección, pero seguro que me he dejado alguna importante. Algunas son sagas, pero he obviado nuevas entregas, como en Indiana Jones y en Terminator. A la derecha de mi blog, debajo de mis datos personales, podéis elegir vuestra trilogía favorita. O favoritas. He dejado la opción de que podáis elegir más de una, ya que para mí sería imposible quedarme solo con una... Lo ideal sería que eligierais tres, pero eso es algo que no voy a poder controlar. 

Tenéis dos semanas para votar. A ver qué sale, espero que no solo reciban votos las de siempre. Y comentaré mis elegidas, a ver si coincido con vuestros gustos.

Si una de vuestras elecciones no está en la lista, agradecería que la pusierais en comentarios en esta entrada :)
¡A votar todos!


martes, 11 de septiembre de 2012

En defensa de Sandy (Grease)

Grease es una de las películas de mi infancia y de mi vida. La veo una vez al año desde...¿siempre? Desde que tengo recuerdos, al menos. La adoro. Y cuando adoras algo, y la gente critica ese algo...Pues como que me puede dar un poco igual, pero hay ciertos argumentos que se encuentran por Internet defendidos en un montón de sitios que me obligan a escribir una réplica. En defensa, en este caso, de la adorable Sandy. Otro día tocará darles un golpe de remo a los que se acusan a Mulan (Disney no se toca) de machista.

Todos hemos hecho bromas sobre el cambio de Sandy en Grease. De virginal a pivonazo y tal. Bien, mi defensa hoy va en este sentido, ya que me he encontrado con que mucha gente considera que Grease te muestra cómo una chica debe renunciar a todo lo que es por estar con un chico, y que lo que hay que hacer es convertirse en una zorra
El cambio es innegable, pero, ¿su cambio es renunciar a ser ella misma porque es una pánfila sin personalidad que solo quiere cazar a su hombre, y hará lo que sea por gustarle? No. Sandy es un niña un poco (bastante) pava y cursi. Se escandaliza por el alcohol, el tabaco, el sexo...por todo más allá de sus faldas largas y sus camisas de punto. Llega hasta tal extremo que su novio, con el que lleva ya mucho tiempo, quiere meterle mano y ella se va corriendo del coche, gritándole que abandona ese "antro de pecado". Oye, que si eres muy modosita y no quieres hacer nada todavía, bueno, lo hablas con él; pero tampoco es para liarle el pollo a tu novio, que lleváis mucho tiempo y es natural que quiera dar algún paso más. Que tampoco te ha forzado a nada. Sandy se da cuenta de que es una estúpida por habérsela liado al pobre Danny de esa manera, y que ya está bien de vivir en Cursiland. Pide ayuda a una amiga, y decide cambiar en ese sentido, y ponerse sexy y en modo más lanzada para su chico. ¿Eso es renunciar a toda su personalidad?


Si se quedara virginal, sería una estrecha. Da un paso para cambiar y dejar de ser tan pava, y se convierte en alguien sin personalidad y en una zorra. Pero antes de ir con lo de zorra, vayamos con Danny Zuko. Danny es un niñato que se comporta como un capullo más de una vez con su novia Sandy. En un intento por recuperarla, decide hacer deporte, ya que Sandy anda tonteando con un atleta. Cuando acaba el curso, él se pasea con su chaqueta de deportista, y sus amigos se sorprenden. Él confiesa que en vez de haber estado haciendo el burro, ha aprovechado el tiempo y ha estado haciendo ejercicio. Por otro lado, se arrepiente las veces que se comporta como un imbécil, y pretende cambiar. Básicamente, los dos deciden cambiar ciertas cosas por el otro y que la relación funcione mejor. Pero solo se dice de ella que no tiene personalidad. A Danny nadie le dice nada. No quiero pensar mal y deducir que es porque una es chica y él un chico...

...pero si me voy al otro argumento, pues creo que sí es por eso. Sandy es una zorra, dicen. ¿Por qué afirmará esto la gente? La chica aparece vestida en plan rockera y de cuero. Pivonazo tremendo. Está sexy. No enseña ni las piernas. Pero es una zorra. ¿Será por lo que hace a continuación? La muy descocada se pone a cantar una canción con su novio. ¿Y qué decía la canción? Recordemos:




Sandy se dedica a decirle a Danny que deje de ser un niñato, y que la trate bien de una puñetera bien. Está enamorada de él, y necesita que él sea una persona madura en esa relación, no un subnormal. Ajá. No veo nada en la letra tipo: me voy a acostar con todos tus amigos, he descubierto que los penes me encantan u otra apología al zorrerío. La chica se pone sexy para su novio y le pide que la trate bien, y resulta que es un zorrón. Y antes, era una estrecha. ¿En serio? Lo peor es que los que la llamen zorra irán de feministas, acusando de que es muy machista el personaje y la actitud de Sandy y blabla. Anda y que os den. Machistas vosotros, que una tía no puede ni ponerse guapa para su novio sin que sea tachada de zorrón. Viva Sandy, viva Danny, viva Grease, viva su banda sonora, viva lo guapa que está Sandy al final de la película y golpe de remo para todos los que llamáis a Sandy zorra. 

domingo, 2 de septiembre de 2012

La vuelta al cole


En febrero escribí la última entrada de este blog. Pensaba hacer una entrada explicando que haría una pausa en el blog, pero lo dejé correr. Y ya decidí que mi ~comeback~sería en septiembre, y aquí estoy otra vez.

Desde febrero, ha pasado mucho tiempo. Y antes de febrero, mis publicaciones eran bastante irregulares. Bueno, meses después, tengo la carrera de Periodismo acabada, y ese ha sido el motivo del abandono. Mucho lío entre clases, prácticas, trabajos y el trabajo final de carrera. De lunes a domingo sin parar, no tenía tiempo para un blog: los escasos ratos en los que no hacía nada, necesitaba de verdad no hacer nada, o me iba a explotar la cabeza. Tampoco tenía tiempo de ver películas. Pero durante ese tiempo, también hice cosas guays, como el placer de entrevistar a Enrique Urbizu (click aquí, página 11)en mis prácticas junto a otra compañera, después de que ganara unos cuantos Goya's por No habrá paz para los malvados. Majísimo. 

Después de acabar la carrera, decidí que sería un verano para no hacer nada, o también, me acabaría explotando la cabeza. He cumplido, y he descansado, y he decidido comprometerme con el blog. Total, ahora él es mi única responsabilidad.

Y hasta aquí mi entrada sobre mi vida que no le importa mucho a nadie. Durante este tiempo, también han aumentado el número de amigos en Filmaffinity. Así que, dejadme (si es que todavía alguien me lee T_T) vuestros usuarios, que os agrego. Mi usuario es Harpita_Marx. He visto a mucha gente tomarse muy en serio Filmafinity y el tema de las puntuaciones, el número de dieces... Mi Filmaffinity es una guía personal. Cuando era una cría, hacía una lista de las películas que veía, y las puntuaba. Me encontré la libreta más tarde y la acabé tirando un poco avergonzada por muchas puntuaciones. Ahora me gustaría verla. Filmaffinity cumple para mí, entre otras, esa función. Yo puntúo según las sensaciones que me transmita una película, y la nota para mí es la forma de valorar cuánto me ha gustado, y puntúo solo pensando en mí. No en unos valores objetivos ni historias de estas. No concibo cómo hay gente que dice que le ha gustado mucha una película, y le pone un 6. Si se tratara de ser críticos profesionales, quizá sí me pensaría más las notas, pero así... Si tengo muchos dieces y nueves, me alegro. Eso es que hay muchas películas que me llegan y me hacen disfrutar mucho, que es lo que yo busco. 

Nada más. Podéis seguirme también en mi Twitter, y me alegro de estar de vuelta. Lo echaba un poco de menos. La próxima entrada ya no será tan inútil como esta, I promise.